lunes, 7 de febrero de 2011


Ahora las mariposas azules siempre me harán recordarte...
y, cuando vea una, bailaré con ella así como te gusta bailar...
solo porque me encanta cómo se reflejan en tus ojos
y cuando te veo pasar es como ver un milagro andar...

Mi mariposa está ahí, en alguna parte, volando para mi;
y nunca será como otras mariposas... esta está hecha para mí.
Y qué si más tarde te volvieras a ir?
Y qué si, cuando esto ocurra, sería como morir?
Y qué si nuevamente te volveré a sentir? Tan mía, tan del aire...
Y qué si confiezo que nunca fui tan de nadie... como me siento de tu baile

Y qué si te reto y respondes con tu siempre encantadora sonrisa?
Vamos a volar otra vez! En un cielo para dos,
un mundo hecho ojos sin fin en el que me gusta resbalar...
justo entre tus mariposas...

Y si antes lo dudé, hoy lo sé. ¡He tenido tanta suerte!
Tengo el milagro más lindo del mundo en mis ojos,
te capturo en ellos mientras vuelas, elegante, inocente... mis ojos ya no podrían olvidarte...
es que si hago una pintura tuya en mi memoria, decoro mi mente.

Decora la acera en la que camino, decoras el cielo,
decoras mi anular, tú decoras, por si fuera poco, la vida en un descuido!
Tu amor me asalta por la espalda, me noquea, me deja encantada, me consuela.

Da vueltas por mi cabeza otra vez, mariposa
Si hago otra pintura tuya en mi memoria...ya no decoraré solo mi mente.

Vuelve a dar vueltas por mi cabeza, mariposa
estreméceme una vez más
pero rico, livianito.